Pluritemática - 13 mayo, 2019
Última estación
por Juan Carlos Capo

Un-ladron-con-estilo-655

Este film se presenta como una comedia dramática, en Forrest, un hombre viejo, un paria en ciudades del Medio Oeste. Robert Redford es quien lleva adelante la apuesta actoral, lo hace  muy bien, ocupando su lugar de hombre en el ocaso de la vida, cubierto de arrugas, trastornos en la marcha, pero hábil en ubicación de qué hay qué hacer, tanto en las cercanías de los bancos, como en su interior, y de cómo tratar a los gerentes y a las cajeras, o cambiar de auto, para eludir a la policía. En suma, Forrest “toca y se va”, con ajustada prisa y buenas maneras, más un maletín forrado de crujientes billetes. Pero hay signos inquietantes: en la gaveta de su auto, lleva un revólver, que nunca usó en su vida.

La vida lo ha tratado rudamente a Forrest. En accidental encuentro topa con Jewel, otro corazón solitario, y entablan una amistad, no exenta de hebras de estima, y hasta se podría decir de incipiente despertar del amor. El inventario del expediente del hombre es descorazonador: su niñez y juventud, estuvieron signadas por fuga de orfelinatos y de establecimientos de detención de chicos sin hogar.

Su vida afectiva fue pobre y solitaria. Los lazos familiares no pudieron ser sostenidos por este hoy hombre viejo armado con un revólver, quien empezó a recorrer el camino del delito, siempre llevado a cabo con modales suaves, hasta caballerescos, sin violencia, sin balaceras, (los testigos no recuerdan si esgrime o no un revólver, cuando se echa a actuar), sin homicidios, más bien apelando al ingenio y a la sociedad con dos camaradas, dos socios que pronto lo habrán de abandonar, porque “una cosa es saber lo que hay que hacer, y otra poder hacerlo”, dice uno de ellos) Más allá del gancho “policial” y el juego con el gato y el ratón, emprendido con el detective John Hunt, encargado de resolver el caso, (Casey Affleck, en desteñida actuación) , una opresión destila de la trama del film sobre la platea.

Es la inminencia del final del viaje, cuando la luz del día, empieza a declinar, y un pensamiento impregnado en vinagre y sal, irrumpe: de que no hay más cosas  por hacer, excepto verificar los polvorientos expedientes de Forrest, hechos de una mismidad estremecedora, que lo hace repetir sus fechorías para continuar sintiéndose vivo.

El personaje es tragado por la llanura y la soledad, virando la presunta comedia inicial  a un negro cristal de Nocturno y melancolía.

 

Estados Unidos. 2018. Dir.: David Lowery. Con Robert Redford, Sissy Spacek, Casey Affleck, Danny Glover, Tom Waits, Keith Carradine.

 

Suscripción

Suscríbase para recibir las últimas novedades de TEND directamente en su casilla de mail.

» Ir al formulario